Denuncia por violencia institucional en la comunidad LGBTIQ+: Fue a hacer una denuncia y prácticamente lo torturaron

Horas de terror vivió un joven de la comunidad LGBTIQ+ en El Carmen cuando fue detenido, golpeado y ultrajado por la policía de la seccional 8va.

Según relata Claudio Castro, se encontraba en la esquina de su casa charlando con unos amigos y vecinos cuando llegó la policía y les pidió que se retiraran, a lo cual todos obedecieron. Sin embargo, a él le ordenaron quedarse para revisarlo.

“Me requisan y un policía de infantería se baja y directamente, sin mediar palabra, me pega” declaró el joven quien agregó que, conociendo sus derechos, por su militancia y activismo, le pido al oficial que le dé su nombre ya que no tenía su identificación visible en el uniforme a lo cual este respondió con otro golpe.

“Me voy a mi casa y hago una denuncia a través del 911 donde me dijeron que me acerque a la comisaría. Cuando voy a radicar la denuncia a la comisaría, el policía que me golpeó me reconoce y me obliga a entrar a una habitación donde me encontré rodeado” detalló el joven.

“El miedo que sentí fue terrible, no entendía porque estaba en esa situación si yo estaba ahí para hacer una denuncia y supuestamente en una comisaría me tengo que sentir seguro», declaró.

“Cuando reaccione trate de irme, de gritar, de que alguien me escuche, pero antes de que pueda terminar me ahorcaron hasta quitarme el aire”. Como si fuera poco, el calvario de este joven carmense se agudizó ya que los policías lo trasladaron al fondo de la seccional, una especie de patio donde se encuentran las celdas y al mejor estilo proceso militar lo arrodillaron en medio de la lluvia y lo golpearon.

“Se burlaban y me decían que, si yo era abogado, porque todo el tiempo preguntaba de qué se me acusaba” manifestó Claudio quien compungido reveló que luego le pidieron que se quite la ropa, “hasta el pantalón y la ropa interior, todo frente a los detenidos que estaban allí mirando. La humillación que viví fue terrible”.

Pero la cosa no terminó allí porque para infundir más miedo, seguramente para que no se vuelva a animar a denunciar, Claudio fue subido a un móvil policial, esposado y trasladado a la zona del dique, sin explicación ni motivo alguno más que infundir el miedo a desaparecer. Finalmente, para terminar con el recorrido del terror lo llevaron a realizarse un test de alcoholemia que por supuesto, dio negativo. 

“Estuve demorado toda la noche y al otro día tipo 9 o 10 de la mañana llega la enfermera de medicina legal que me hace unas fotos donde se ven los moretones y las lesiones que me habían provocado, pero ella tampoco se identificó. Después de esto una oficial a cargo me informó que iba a ser imputado por resistencia a la autoridad y una contravención por no usar barbijo. Simplemente por haber ido a hacer una denuncia por abuso de autoridad”.

Toda esta situación fue denunciada por Claudio Castro en el marco de una conferencia de prensa del Foro de Derechos Humanos de la Diversidad Sexual donde además se dieron a conocer diferentes casos de violencia institucional hacia la comunidad LGBTIQ+ de la provincia.

La mayoría de las denuncias están dirigidas al accionar violento y casi criminal de la policía, no solo en casos similares al de Castro sino también para con las mujeres trans en general y trabajadoras sexuales en particular que a diario son amedrentadas, violentadas y chantajeadas, aseguraron desde el Foro.

De igual manera, apuntaron contra la violencia que las personas de esta comunidad sufren a la hora de acceder a la salud donde la totalidad de las veces son discriminadas y vulneradas en sus derechos hasta el punto en el que se violan normas y leyes que les amparan, como la Ley de Identidad de Género, Ley de Cupo Laboral Trans, Ley Micaela, los Pactos, Tratados y Convenios Internacionales de Derechos Humanos y de la Diversidad Sexual argumento el referente de Noa Diversa Jorge Wierna.

“El uniforme debe darnos seguridad y no miedo. Genera que muchos compañeres no quieran denunciar porque después les caen con todo. Queremos prevenir, que nos cuiden y velen por nuestros derechos” remarcó el referente.

Por último cabe señalar que la imputación y contravención a Claudio Castro están siendo apeladas legalmente con ayuda del Consejo Provincial de la Mujer e Igualdad de Género y el Inadi. Además, de que en los próximos días se realizará la primera reunión del Foro de Derechos Humanos de la Diversidad Sexual para definir acciones contra el flagelo de la violencia institucional.