Pasaron 8 años desde el primer Ni Una Menos impulsado por el femicidio de Chiara Páez, la adolescente de 14 años que estaba embarazada y fue asesinada por su novio que movilizo a miles de mujeres a lo largo y ancho del país en contra los femicidios y la violencia machista.
A ocho años de aquella primera convocatoria las mujeres y diversidades sexuales siguen reclamando al estado la implementación de políticas que prevengan el flagelo del femicidio, que asignen partidas presupuestarias acordes a la realidad que se vive en cada lugar, que se eduque con perspectiva de género para generar un cambio cultural sobre la violencia machista y sobre todo que garantice justicia para los crímenes de odio contra las mujeres.
La concentración en la provincia de Jujuy, prevista para las 17 horas, tuvo lugar en la Plaza Belgrano donde, además, como es costumbre, se montó un excesivo operativo de seguridad. Desde este lugar la multitudinaria columna recorrió las principales arterias del centro capitalino repitiendo cantos y mensajes contra la violencia machista y sobre la responsabilidad de los gobiernos.
En el caso particular de la provincia de Jujuy las mujeres, nucleadas en diferentes organizaciones populares, sindicatos y agrupaciones políticas exigieron una Ley de Emergencia en Violencia de Género real ya que la La Ley 6186, también conocida como Ley “Iara”, si bien dispuso la creación de un consejo asesor con la función de asesoramiento permanente y participación en la elaboración de un plan estratégico para la prevención y erradicación de la violencia de género y diversidad no sesiona desde hace meses.
Conjuntamente, se exigió la ampliación de los equipos interdisciplinarios del estado para el abordaje de los casos de violencia de género y se reclamó por el poco avance en el correcto abordaje, intervención de la fuerza policial en los casos de violencias basadas en el género.